Primera Semana del año y se siente la buena energía. Sabemos que estos tiempos han requerido aprendizajes y nuevas formas de pensar. Cada vez es más importante el cuidado de nuestro sistema interno a nivel emocional, físico y espiritual, para esto es importante seguir conociendo y explorando las diferentes formas de reconectarnos con nuestra esencia y crear sistemas de soporte que nos permitan relacionarnos con otros.
Coaching también está tomando un rumbo más real y sincero al ir profundizando en los temas que son parte de éste fenómeno mundial de expansión de consciencia donde el mundo en tiempo real nos lanza cambios a quemarropa y se requiere una sensibilidad más compasiva con respecto al otro y el desarrollo de conocimientos que explican los fantasmas de la psique que constantemente hacen difícil diferenciar la situación de la emoción.
Creo que nadie ha salido ileso de los efectos del C0VID. Los espacios de aislamiento, la separación, los cambios en las relaciones de trabajo, la tecnología y la gran incertidumbre que ha amplificado los miedos y neurosis que nos llevaron a entrar en espacios emocionales cada vez más serios, requieren mayor atención. Esto es una gran oportunidad para nosotros en trabajar para estar con nuestra esencia y conectar con otros.
Es una oportunidad para conocer el conflicto interno, ver nuestras fortalezas y debilidades.
Como decía John Whitmore, “Hasta que el inconsciente se vuelva consciente seguirá dominando tus acciones y evitará que logres el resultado que quieres”. Este “cable pelao” está presente en cada sesión, y como Coaches, nuestra responsabilidad es conocer esta dinámica, para así tener un mayor dominio de lo que hacemos en nuestras sesiones desde la mentalidad del Coach.
Conflicto Estructural
El conflicto interno más común es el que se presenta entre nuestro deseo de lograr algo y la creencia dominante que NO somos capaces de cumplir con ese deseo. Es la base de las Creencias Limitantes y ese conflicto no resuelto, que desata emociones de miedos, ansiedad, frustración y rechazos, nos hace sabotearnos constantemente y evitar nuestro progreso. Afortunadamente estos conflictos son totalmente Coacheables.
A esto le sumamos la crisis de salud mental que ocurre en este momento en todo el mundo. Esto se manifiesta en las neurosis presentes en personas que consideramos “normales». Lo observamos en cada cliente, en cada interacción.
Programas como “The me you can’t see” en Apple TV, nos habla de este fenómeno. Nos da a conocer la inmensa importancia de explorar estos temas, ya que como COACHES, somos parte de la solución y debemos sacar la cabeza de la arena y abordar la responsabilidad de ayudar al otro donde el psicoanálisis falló.
¿CÓMO RESOLVER ESTE CONFLICTO ESTRUCTURAL INTERNO?
Para empezar, hacerlo consciente, reconocer lo que no queremos ver, y aprender lo que no conocemos.
Reconocer como éste conflicto nos lleva por camino de errores, hasta aprender las lecciones que nos conectan con nuestro brillo y potencial. Reconocer de una vez por todas que NO es la SITUACIÓN, es la EMOCIÓN.
El conflicto interno produce la compulsión de seguir detonando las emociones, y que haríamos lo que fuese por evitar: rechazo, crítica, abandono, vencimiento, privación, que nos hacen inconsistentes con respecto a lo que deseamos de la vida.
Darles espacio a estas emociones, tratar de justificarlas, es parte del mecanismo del auto daño que, a veces como COACHES, con toda la buena intención, no abordamos, ya que el fantasma de la psique sobrevive en anonimato.
Del trabajo de Peter Michaelson, Psiquiatra reconocido nos llegan las siguientes preguntas a contemplar:
Esto aplica para personas, familias, empresas y sociedades completas. Es una pandemia.
Conscientemente buscamos la conexión con nuestra verdadera esencia, queremos sentirnos amados, respetados y exitosos. Podemos conscientemente conectar con nuestra máxima aspiración, pero hasta que la conexión inconsciente de estos conflictos internos no se haga consciente, seguiremos auto saboteándonos y dañándonos en nuestro viaje personal hasta que logremos tomar una decisión firme: el no desear sentirnos así y comenzar el viaje interno a la exploración profunda que lleva a la resolución de estos conflictos y así alinear el cableado interno para lograr plenitud.
Ahí es, donde el COACH de hoy, debe apuntar y para eso debemos afrontar la realidad con mucho coraje, porque siento que enfocarse solo a demostrar competencias le hace bien solo al ego del coach y no termina de ayudar al cliente.
Al reconocer y comprender este conflicto interno, se desmonta la imagen interna. El conocimiento nos expone en su totalidad a nuestra zona oscura. Vemos cómo nuestro EGO con sus defensas, nos “protege» al evitar que veamos la realidad de cómo nos hacemos daño, a costo de mantenernos estancados y alejados de aquello a lo cual estamos destinados, a nuestra grandeza.
Tenemos un rol muy importante hoy y es hora de asumir con responsabilidad nuestro rol como Coaches, para seguir explorando, trabajando y desvelando los fantasmas de la psique, para lograr la libertad y la plenitud.
Los invito a conocer más de estos temas este año 2022 y conocer cómo Coaching se está conectando más con la psicología y las dinámicas de la expansión de consciencia.
Estos temas los estamos desarrollando y explorando como parte de nuestra Certificación Internacional de Life & Leadership Coaching y con mayor profundidad en el Master Life Coaching.
Gracias por darnos la inspiración de seguir creando, creciendo y expandiendo.
Add a Comment